sábado, 26 de septiembre de 2020

Tempus Fugit

 



Tempus fugit (Aló-pecia)


Crece,

envejece,

y, si puedes,

mantente en tus trece.

Busca curro,

busca pareja,

busca amigos,

ponte pelo.

Pilla el coche,

dale vueltas a la noche.

Gimnasio,

espacio y calma;

vivir poniendo cien alarmas.

Toma otra mañana, olvida otra cara.

Quédate en la casa, sin tus cien amigos,

quédate sentado dilatando tu ombligo.

Acuérdate de joven cuando sí salías,

todos los días...

Casi todos,

estuvierais dos, tres o solos.

Acuérdate de niño, cuando sí venías;

Con las tías,

con los tíos,

con tus primas y tus primos.

Ahora la familia ya solo son amigos. (O ni eso)

Recuerda bien también,

cuando el problema no era ser feliz,

si no,

parar de reír.

Ahora la canción de los años suena más lenta, a ritmo de balada.

Ahora la canción está casi pausada y,

a veces,

no suena nada.

Ahora con las arrugas, es triste hasta una carcajada.

Eres viejo, el tiempo pasa y,

por más que corras,

ya no tienes casa.

Eres mayor y,

aunque sueñes con volar,

lo que toca es ir al parque a caminar.

Con achaques,

con reuma,

mala vista y,

las piernas cansadas: ¡qué terrible es la edad!

Sin embargo,

aunque te duela algún achaque,

peor es la soledad,

y quemar, cada año,

otro almanaque.

Pobre viejo solo,

pobre sólo viejo.

Vago, verborreico, y cansado:

¿Dónde vas en ese estado?

“No voy, no vengo,

sólo me llevan los años, y esta es la verdad;

¡Tempus fugit y yo... Sin estos pelos!”